Cada día, en todo el mundo, millones de personas visitan las redes sociales y eso representa un número considerable de clientes potenciales que puedes seducir para que compren los productos y servicios que comercializas. Para lograrlo solo debes seguir estos simples tips y tendrás el éxito asegurado:
Aprende de tus equivocaciones.
Encapricharse y echarle toda la culpa al público es un error común de muchísimos emprendedores: ¡no caigas en él! Lo que debes hacer es usar las críticas para mejorar la calidad de tu servicio.
Todas las grandes marcas han tenido que aplicar esta estrategia, incluso las más grandes: Apple fracasó al presentar su segundo modelo de ordenador pero la experiencia le sirvió a Steve Jobs para entender hacía donde se orientaba el mercado y lograr grandes éxitos.
Recuerda: no está mal cometer un error, lo realmente malo es no aprender absolutamente nada de él.
Aprovecha las redes sociales.
Facebook, Twitter e Instagram son herramientas fundamentales que cada día visitan millones de personas, por eso debes usarlas en tu beneficio, generando publicaciones de forma continua para llamar la atención sobre tu empresa.
Por ejemplo, todos los días puedes programar cuatro textos cortos, a horas fijas, comentando una promoción en especial y la forma de acceder a ella. Es gratis, barato y simple. ¡No te pierdas esa oportunidad y pronto comenzarás a ver resultados!
No des lugar a suspicacias.
Los picaros han existido en todas las épocas, y hoy, gracias a Internet, los fraudes online son muy corrientes (“usted ganó un millón de dólares, envíenos su número de documento, código de caja de ahorro y teléfono y…”), por eso es muy importante que pongas los datos de tu compañía bien a la vista.
Dirección, teléfono, correo electrónico, responsable inscripto… detalles a los que puedes sumarle fotos del lugar y el personal que trabaja contigo: así demuestras que tienes una empresa real.
Se original.
Si intentas copiar los procedimientos de las grandes compañías inevitablemente te verás sometido a comparaciones en las cuales terminarás perdiendo porque no cuentas con los recursos de los que ellas disponen (¿Quién puede ganarle a multinacionales como Coca-Cola, Ford o Adidas?). Por ese motivo, lo mejor que puedes hacer es apostar a tu propia creatividad, buscando maneras de diferenciarte de la competencia usando todo aquello que te hace único: el trato personalizado, la rapidez de entrega, el servicio técnico posterior a la venta, etc.
¡Nunca mientas!
Puede llenarse toda una biblioteca con los libros de quejas de las personas que han realizado compras en las redes sociales y no obtuvieron el producto por el cual pagaron.
Para no ponerte innecesariamente en una situación comprometida –y generar rumores negativos sobre ti- se muy específico sobre lo que estás ofreciendo: si vendes zapatillas pon a la vista del cliente toda la información que necesita, incluyendo detalles de tamaño, color y precio, fotos e, incluso, videos.
Aprovecha la tecnología existente.
Afortunadamente junto a Internet han aparecido herramientas muy útiles que permiten entender el comportamiento de los usuarios en un periodo determinado de tiempo (una semana, seis meses, un año…); esto incluye programas como Google Analytics: ¡aprovéchalos para aprender en que tuviste razón y en que fallaste!
Deja un comentario